
Aqui fué donde se conocieron, en la entrega del premio Planeta 2008. ("Antonio" se quedó de piedra al conocer la noticia.)
MIS FLIRTEOS CON SAVATER (Jamás el espíritu dubitativo, aquejado de hamletismo, fue pernicioso)
A Fernando Savater, le conoce uno de oídas, de toda la vida: por prensa, TV, promocionando sus libros, recibiendo premios etc .Pero en mi caso concreto, lo que se dice “tener una experiencia personal” con él, no la tuve hasta hace unos doce años. Él llegó a mí, precisamente por uno de los medios menos recomendables hoy en día, la TV..Por una entrevista en vivo (que ya es difícil, cuando a variosde sus amigos ya los ha matado ETA) y en directo. Precisamente esta entrevista fue a raíz de que se le concediera a la Iniciativa Ciudadana ¡BASTA YA!, de la que él es portavoz, el premio Sajarov a la Concordia del Parlamento Europeo: por hacer frente “dialécticamente” a ETA; cosa de locos, según los seguidores de Descartes.
Grabé en cinta de video la referida entrevista, con la posterior idea de escucharla varias veces al año. Y así está siendo: el Viernes Santo, mientras espero que la parienta y el chico bajen del Calvario, es uno de mis momentos preferidos: con la casa completamente en silencio, escuchar la inteligente humildad de este hombre es un privilegio que no tiene precio.Qué no daría por haber sido alumno suyo, aunque hubiese sido a distancia, claro; con alguna clase por Internet.
En la mencionada entrevista, dice Savater cosas como que fue un niño mayormente lector (y lo demostró sobradamente cuando publicó el libro “La Infancia Recuperada”, donde da repaso a la mayoría de los ejemplares que él leía de niño y de joven. (¡Santo cielo! ¿quién nos librará de la invasión de Play Station, y de otros imperios aún más vulgares?). Que en el colegio se juntaba con los torpes como él, y que, en el recreo, algunos niños lo perseguían diciéndole “gorila gorila”; hecho que recordaría en su autobiografía “Mira por dónde”, con las siguientes palabras: “Quiero morir gorila, solitario en lo más alto, luchando y perdiendo pero sin dejar de amar desesperadamente: como King Kong” La torpeza física que declara de niño, no cesó en él de mayor, reconociendo que es un inútil para todo lo que se necesite alguna habilidad: “no sé beber en porrón, me pongo perdido; ni montar en bicicleta…….”. Pero que si por leer pagaran se hubiera buscado bien la vida, pero como no es así, por similitud se dedicó a escribir (tiene media centena de libros publicados), y como estudíó filosofía, pues ha sido profesor en la Universidad hasta hace como un año que se ha jubilado.Ya les digo, una entrevista en la que habla una de las personas más cultas y sabias de este pais, pero en la que no se sonroja al admitir sus limitaciones; y sobre todo a mostrar su lado (que le pilla “tol” cuerpo) humano, “demasiado humano”.
Esta entrevista supuso para mí, un punto de inflexión (mi vida está llena de esos inflexivos puntos): dicen que el cerebro es “redondo” para que las ideas puedan cambiar de dirección. Aún mejor lo ilustró el gran Groucho Marx cuando dijo: “Señores estos son mis principios, pero si no les gustan tengo otros”. Otro de los preferidos de Savater es el, por él denominado, Voltaire del S.XX , y que no podía ser otro que Bertrand Russell; quien elevó a los altares profanos el acertado aforismo: “Gran parte de las dificultades por las que atraviesa el mundo, se deben a que los ignorantes están completamente seguros y los inteligentes llenos de dudas“A partir de aquí (de la entrevista en TV) empiezan las coincidencias y las empatías con Savater Confluimos en el fervor por Borges, de quien dice que lo ha leído todo, yo no llego ni a un cuarto; a él lo lleva a escribir un ensayo sobre El Gigante de Buenos Aires, a mí me corresponde comprarlo y leerlo: “Borges o la ironía metafísica”. Como ahora baja mi chicuelo de su habitación para desayunar e irse al colegio, el hecho me hace recordar, además del anteriormente mencionado título “Infancia Recuperada”, su “Ética para Amador”, y pensar en que el profesor lo escribíó a petición de una amiga, profesora de Instituto, a la que le costaba acercar la filosofía a los adolescentes; para los cuales Savater tiene un don especial. “Incluso les hace reír impartiendo clase de filosofía, que ya tiene mérito”, decía la profesora. Pues como el adolescente que tenía más a mano Savater, era su hijo Amador, ya nos queda claro el origen del título del libro.
Observamos, cómo Savater tiene un libro para cada etapa de la vida; y una vida entregada a los libros…., a la lectura.Ya he mencionado sus dos libros relacionados con la gente más joven: “La Infancia Recuperada” y “Ética para Amador”. A los mayores no nos olvida, por lo que acerca a nuestras vidas a otros autores saludables, realizando ensayos sobre ellos: el ya mencionado “Borges o la ironía metafísica”. Sobre Cioran escribió su tesis doctoral, la cual no pudo leer en los primeros años de redactarla (en la agonía del franquismo), porque le acusaban de querer ridiculizar a la institución universitaria, Savater tradujo al español parte de su obra, entre otros libros, “Breviario de podredumbre” donde podemos encontrar, en el capítulo llamado Genealogía del fanatismo, las siguientes y antidogmáticas palabras: “En sí misma, toda idea es neutra o debería serlo; pero el hombre la anima, proyecta en ella sus llamas y sus demencias ; impura, transformada en creencia, se inserta en el tiempo, adopta figura de suceso: el paso de la lógica a la epilepsia se ha consumado…..Así nacen las ideologías, las doctrinas y las farsas sangrientas.(…) Jamás el espíritu dubitativo, aquejado de hamletismo, fue pernicioso”.
Muchos años más tarde, ya en el 2007, desarrolla Savater la idea de Ciorán antes expuesta, en un extraordinario ensayo de 260 páginas titulado “La Vida Eterna”; léanlo y quizás después serán un poco menos “fanáticos”.Y posiblemente empiecen a pensar como Arrabal: “seamos como niños, vivamos sin ideología (….).Ante la inteligencia, yo saludo, pero ante la bondad, yo me arrodillo”.Que la inteligencia no prime sobre la bondad, o en todo caso, que siempre vaya acompañada de ella.
Acabo mi reflexión por el mundo “savateriano”, impregnando mis dedos de polvo y ácaros, al extraer del estante correspondiente, dos títulos que no se pueden ignorar:--“El jardín de las dudas”, que es un ensayo sobre Voltaire, camuflado de novela en forma epistolar, y en cuyo epílogo podemos leer que nos dice Savater:”La moda es antiilustrada y veo que todo lo que detesto vuelve a estar de moda. Contra tal tendencia he escrito este libro –como antes otros de los mios- a modo de reivindicación de un ideario que sigo considerando perentorio y de homenaje a quienes, con su coraje y lucidez, lo hicieron posible.”--“Mira por dónde (autobiografía razonada)”, cuya lectura, nos sirve de coronación apoteósica, para comprender la obra y vida, de este torpe para el porrón, pero sin par en valentía y en humanidad ilustrada.
No les hablaré, de momento, de las otras cuatro decenas de libros escritos por Savater, por la sencilla razón de que, ni los cubren mis ácaros, ni los he leído. Pero quizás el año que viene………
A Fernando Savater, le conoce uno de oídas, de toda la vida: por prensa, TV, promocionando sus libros, recibiendo premios etc .Pero en mi caso concreto, lo que se dice “tener una experiencia personal” con él, no la tuve hasta hace unos doce años. Él llegó a mí, precisamente por uno de los medios menos recomendables hoy en día, la TV..Por una entrevista en vivo (que ya es difícil, cuando a variosde sus amigos ya los ha matado ETA) y en directo. Precisamente esta entrevista fue a raíz de que se le concediera a la Iniciativa Ciudadana ¡BASTA YA!, de la que él es portavoz, el premio Sajarov a la Concordia del Parlamento Europeo: por hacer frente “dialécticamente” a ETA; cosa de locos, según los seguidores de Descartes.
Grabé en cinta de video la referida entrevista, con la posterior idea de escucharla varias veces al año. Y así está siendo: el Viernes Santo, mientras espero que la parienta y el chico bajen del Calvario, es uno de mis momentos preferidos: con la casa completamente en silencio, escuchar la inteligente humildad de este hombre es un privilegio que no tiene precio.Qué no daría por haber sido alumno suyo, aunque hubiese sido a distancia, claro; con alguna clase por Internet.
En la mencionada entrevista, dice Savater cosas como que fue un niño mayormente lector (y lo demostró sobradamente cuando publicó el libro “La Infancia Recuperada”, donde da repaso a la mayoría de los ejemplares que él leía de niño y de joven. (¡Santo cielo! ¿quién nos librará de la invasión de Play Station, y de otros imperios aún más vulgares?). Que en el colegio se juntaba con los torpes como él, y que, en el recreo, algunos niños lo perseguían diciéndole “gorila gorila”; hecho que recordaría en su autobiografía “Mira por dónde”, con las siguientes palabras: “Quiero morir gorila, solitario en lo más alto, luchando y perdiendo pero sin dejar de amar desesperadamente: como King Kong” La torpeza física que declara de niño, no cesó en él de mayor, reconociendo que es un inútil para todo lo que se necesite alguna habilidad: “no sé beber en porrón, me pongo perdido; ni montar en bicicleta…….”. Pero que si por leer pagaran se hubiera buscado bien la vida, pero como no es así, por similitud se dedicó a escribir (tiene media centena de libros publicados), y como estudíó filosofía, pues ha sido profesor en la Universidad hasta hace como un año que se ha jubilado.Ya les digo, una entrevista en la que habla una de las personas más cultas y sabias de este pais, pero en la que no se sonroja al admitir sus limitaciones; y sobre todo a mostrar su lado (que le pilla “tol” cuerpo) humano, “demasiado humano”.
Esta entrevista supuso para mí, un punto de inflexión (mi vida está llena de esos inflexivos puntos): dicen que el cerebro es “redondo” para que las ideas puedan cambiar de dirección. Aún mejor lo ilustró el gran Groucho Marx cuando dijo: “Señores estos son mis principios, pero si no les gustan tengo otros”. Otro de los preferidos de Savater es el, por él denominado, Voltaire del S.XX , y que no podía ser otro que Bertrand Russell; quien elevó a los altares profanos el acertado aforismo: “Gran parte de las dificultades por las que atraviesa el mundo, se deben a que los ignorantes están completamente seguros y los inteligentes llenos de dudas“A partir de aquí (de la entrevista en TV) empiezan las coincidencias y las empatías con Savater Confluimos en el fervor por Borges, de quien dice que lo ha leído todo, yo no llego ni a un cuarto; a él lo lleva a escribir un ensayo sobre El Gigante de Buenos Aires, a mí me corresponde comprarlo y leerlo: “Borges o la ironía metafísica”. Como ahora baja mi chicuelo de su habitación para desayunar e irse al colegio, el hecho me hace recordar, además del anteriormente mencionado título “Infancia Recuperada”, su “Ética para Amador”, y pensar en que el profesor lo escribíó a petición de una amiga, profesora de Instituto, a la que le costaba acercar la filosofía a los adolescentes; para los cuales Savater tiene un don especial. “Incluso les hace reír impartiendo clase de filosofía, que ya tiene mérito”, decía la profesora. Pues como el adolescente que tenía más a mano Savater, era su hijo Amador, ya nos queda claro el origen del título del libro.
Observamos, cómo Savater tiene un libro para cada etapa de la vida; y una vida entregada a los libros…., a la lectura.Ya he mencionado sus dos libros relacionados con la gente más joven: “La Infancia Recuperada” y “Ética para Amador”. A los mayores no nos olvida, por lo que acerca a nuestras vidas a otros autores saludables, realizando ensayos sobre ellos: el ya mencionado “Borges o la ironía metafísica”. Sobre Cioran escribió su tesis doctoral, la cual no pudo leer en los primeros años de redactarla (en la agonía del franquismo), porque le acusaban de querer ridiculizar a la institución universitaria, Savater tradujo al español parte de su obra, entre otros libros, “Breviario de podredumbre” donde podemos encontrar, en el capítulo llamado Genealogía del fanatismo, las siguientes y antidogmáticas palabras: “En sí misma, toda idea es neutra o debería serlo; pero el hombre la anima, proyecta en ella sus llamas y sus demencias ; impura, transformada en creencia, se inserta en el tiempo, adopta figura de suceso: el paso de la lógica a la epilepsia se ha consumado…..Así nacen las ideologías, las doctrinas y las farsas sangrientas.(…) Jamás el espíritu dubitativo, aquejado de hamletismo, fue pernicioso”.
Muchos años más tarde, ya en el 2007, desarrolla Savater la idea de Ciorán antes expuesta, en un extraordinario ensayo de 260 páginas titulado “La Vida Eterna”; léanlo y quizás después serán un poco menos “fanáticos”.Y posiblemente empiecen a pensar como Arrabal: “seamos como niños, vivamos sin ideología (….).Ante la inteligencia, yo saludo, pero ante la bondad, yo me arrodillo”.Que la inteligencia no prime sobre la bondad, o en todo caso, que siempre vaya acompañada de ella.
Acabo mi reflexión por el mundo “savateriano”, impregnando mis dedos de polvo y ácaros, al extraer del estante correspondiente, dos títulos que no se pueden ignorar:--“El jardín de las dudas”, que es un ensayo sobre Voltaire, camuflado de novela en forma epistolar, y en cuyo epílogo podemos leer que nos dice Savater:”La moda es antiilustrada y veo que todo lo que detesto vuelve a estar de moda. Contra tal tendencia he escrito este libro –como antes otros de los mios- a modo de reivindicación de un ideario que sigo considerando perentorio y de homenaje a quienes, con su coraje y lucidez, lo hicieron posible.”--“Mira por dónde (autobiografía razonada)”, cuya lectura, nos sirve de coronación apoteósica, para comprender la obra y vida, de este torpe para el porrón, pero sin par en valentía y en humanidad ilustrada.
No les hablaré, de momento, de las otras cuatro decenas de libros escritos por Savater, por la sencilla razón de que, ni los cubren mis ácaros, ni los he leído. Pero quizás el año que viene………