lunes, 28 de septiembre de 2009

PLATON Y UN ORNITORRINCO ENTRAN EN UN BAR (4)

Imagen By: Ojito Saltón


RACIONALISMO

Cuando el filósofo racionalista del siglo XVII Gottfried Wilheim Leibniz dijo, en una frase que se ha hecho famosa, <<Éste es el mejor de los mundos posibles>>, se expuso al más bochornosos de los ridículos. Sus ecos se hicieron notar a partir de los inicios del siglo siguiente con Cándido, la novela de Voltaire sobre un joven bueno (Cándido) y su mentor filosófico, el señor Panglós (la versión volteriana de Leibniz). En sus viajes, el joven Cándido se tropieza con inundaciones, ejecuciones injustas, epidemias y un terremoto inspirado en el que asoló Lisboa en 1755. Nada, sin embargo, quiebra la insistencia del doctor Panglós en que “Todo es lo mejor en lo mejor de los mundos”. Cuando Cándido se propone salvar a Jacques, el anabaptista holandés, que se está ahogando, Panglós le detiene, probándole que la bahía lisboeta había sido “concebida expresamente para que los anabaptistas se ahogaran en ella”.

Dos siglos después, el musical que Leonard Bernstein estrenó en 1956, Cándido, se sumaba a la burla. La canción más conocida del musical, “El mejor de los mundos posibles” hace que Panglós y el resto de los personajes canten la letra de Richard Wilbur en la que se elogia la guerra como una bendición indirecta, porque nos unifica a todos, en tanto que víctimas.

Terry Southern y Mason Hoffenberg se unieron a la diversión con su versión obscena: Candy, una jovencita inocente que, pese a que todos los hombres con los que se cruza se aprovechan de ella, sigue siendo ingenua y optimista. En 1964 se realizó una versión cinematográfica con un reparto trufado de estrellas, entre las que destacaba el filósofo Ringo Starr.


TRES VISIONES SOBRE EL FAMOSO CASO DEL VASO DE AGUA:

- El optimista dice: “El vaso está medio lleno”.
- El pesimista dice: “El vaso está medio vacío”.
- El racionalista dice: “Este vaso es el doble de grande de lo que debería ser”.

Claro como el agua, ¿verdad?

viernes, 25 de septiembre de 2009

CAPITULO (2) 16, DE DON QUIJOTE

Foto de Oscar: Un petrificado y helado Cervantes en Herencia (Ciudad Real) en febrero de 2.005.
Cap. (2) 16


Encontramos en este cap. a don Quijote la mar de contento por haberse erigido en el “masca” de los caballeros andantes. Muy pronto hubo olvidado aquel océano de palos, de derribo de dientes sin visita al dentista y “la lluvias de estacas de los yangüeses”. ¡Ay! –suspiró- , si no fuera porque su Sra Dulcinea estaba encantada, el batiría el record de felicidad del Libro Guinnes.

Sancho, por su parte, continuaba dándole vueltas a la batidora (cabeza); no le cuadraba eso de que el de los Espejos y su criado fuesen vecinos de su amnésico “lugar de la Mancha”. ¡Con aquellas narices del diablo! que no podía apartar de sus “mientes”. Se lo hizo saber a su amo. ¡Chico! –le respondió don Quijote- los encantadores, te lo estoy diciendo desde antes de 1605, que hace ya 10 años, y es que no te enteras, ¡que me tienen ojeriza! –añadió el antaño triste y ogaño ufano caballero-. Sancho se echó el pito al bolsillo y no dijo ni media más.

En esto que viene detrás de ellos, y se dispone a adelantarlos, una lechuga montada en una yegua torda (menos mal que la equina no era también verde); bueno: entiéndase El caballero del Verde Gabán. ¡ Maestro! –le vocifera don Quijote- no le importaría a usted acompañarnos en este camino, y así lo fatigaremos ( Borges) al unísono – le interpela a continuación-. Acepta la invitación el de los primaverales colores, con la única objeción de que “el entero” Rocinante respete la virginidad de la impúber tordilla. Le da garantías don Quijote de que será respetada la equina.

Van ya caminando juntos los tres jinetes, y un caballero admirado de la singularidad del otro, “y si mucho miraba el de lo verde a don Quijote, mucho más miraba don Quijote al de lo verde”. Y porque entre caballeros andantes no estaría bien visto exteriorizar sentimientos “homófilos”, si no, que a buen seguro que don Quijote no se hubiera reprimido en exhibir alguna muestra de “afecto”: tal es la exposición de virtudes y galanía que don Quijote ve en su invitado acompañante.

Cervantes crea este verde personaje para reflejar su ideal de vida. Él quisiera mirarse en un Espejo, y que éste le devolviera la imagen del Verde Gabán: con quince años menos, bien parecido (y sobre todo con todos sus dientes), con una buena hacienda, y con mucho tiempo para dedicarse a la vida contemplativa; días tranquilos de pesca y caza, dedicación a los amigos y a la familia, y sobre todo, llevar una vida moral que se atiene a los cánones del catolicismo: como es asistir a misa diaria o dar algunas limosnas a los pobres. Don Miguel, ya a sus años, prefiere invertir en valores seguros, y qué mejor valor que invertir en “La Vida Eterna” (libro de Savater con el cual hubiese acabado ateo); pero no, nuestro ilustre escritor intenta ponerse bien con dios, suscribiendo acciones del más allá, según los dictados de los clérigos aficionados a la hoguera en fechas no coincidentes con “la candelaria”.

Finalmente el del Verde Gabán cuenta a don Quijote que tiene un hijo que ha estudiado seis años en Salamanca, pero que son años desperdiciados, porque al “niño” no le gusta más que la poesía. Y que lee a los clásicos grecolatinos (o sea que no iría al Carrefour a por libros). Aprovecha don Quijote (ahora alter ego de Cervantes) para hacer una excelente loa sobre la poesía, con preciosas palabras; y que si, tal como dicen, Cervantes quizás no fue buen poeta, sí supo escribir una espléndida prosa poética.

“La poesía, señor hidalgo, a mi parecer, es como una doncella tierna y de poca edad, y en todo extremo hermosa…”
Nota revulsiva:
Este revulsivo comentario pertenece a la Red de Comentarios Quijotescos, coordinado por el "profe" P.O.E. (no leer Edgar Allan) desde su blog La Acequia.

lunes, 21 de septiembre de 2009

PLATON Y UN ORNITORRINCO ENTRAN EN UN BAR (3)


ESENCIALISMO

Aristóteles trazó una distinción entre propiedades esenciales y accidentales. En su opinión, las propiedades esenciales son aquellas sin las que la cosa no sería lo que es, y las propiedades accidentales las que determinan cómo es una cosa, pero no lo que es. Por ejemplo, Aristóteles pensó que la racionalidad es esencial al ser humano y, dado que Sócrates era un ser humano, la racionalidad de Sócrates era esencial para que Sócrates fuera Sócrates. Sin la propiedad de la racionalidad, Sócrates simplemente no hubiera sido Sócrates. Ni siquiera hubiera sido un ser humano, mucho menos Sócrates. Por otra parte, Aristóteles pensaba que la propiedad de ser chato era meramente accidental. Su nariz chata formaba parte de cómo era Sócrates, pero no era esencial a lo que era ni a quién era. Dicho de otro modo, quítale la racionalidad a Sócrates y ya no sería quien es. Pero si le haces una cirugía estética, será Sócrates con la nariz reconstruida. Lo que nos recuerda un ….

CHISTE:

Cuando Thompson cumplió los setenta, decidió cambiar completamente su estilo de vida para vivir más años. Se sometió a una dieta muy severa, daba largas caminatas, nadaba y tomaba el sol. En tres meses, Thompson perdió cinco kilos, redujo quince centímetros el perímetro de su cintura y aumentó doce centímetros de pecho. Esbelto y bronceado, decidió dar el toque final a su aspecto con un corte de pelo deportivo. A la salida de la peluquería, le atropelló un autobús.
- ¡Dios mío! – gritó cuando yacía moribundo- . ¿Cómo has podido hacerme esto?
- A decir verdad, Thompson –dijo una voz que procedía del cielo-. ¡No te he reconocido!!!

Revulsiva Nota:

Nuestra amiga SELMA, y mi colega coeditor de Espolón ÓSCAR, iniciaron la lectura de este chistoso-filosófico libro al mismo tiempo que un servidor.
Les agradezco los comentarios con interesantes aportaciones que incluyen en mis entradas. Y les ruego que continúen enriqueciendo, con los chistes y anécdotas que crean convenientes, la publicación de estos pequeños retazos de iniciación filosófica.

Va para ellos mi sincero agradecimiento.

viernes, 18 de septiembre de 2009

CAPITULO (2) 15, DE DON QUIJOTE


Un ferroso don Quijote hayado en Puente Genil, obra del artesano local Antonio Gálvez Mateos.

CAP. (2) 15

Finalmente Cervantes se decide por bautizar al del Bosque como “de los Espejos” (elemento especular odiado, por cierto, por Borges. Llegando a decir el ciego de Buenos Aires: “Odio los espejos y la cópula, porque multiplican al género humano”), desterrando las humedades de los bosques, selvas y otros verdes seres….; pero sólo hasta el cap. siguiente (y perdón por el anticipo), donde el, o lo, que aparecerá en verde, será un caballero así vestido entero.

Sea como fuere el caballero derrotado, su derrota, hizo más que feliz a don Quijote. Ahora debería ir a rendir honores a su Sra. Dulcinea, previa visita al algebrista y “ biezmista” (el que “endereza” los huesos y les da consuelo). Una vez que ya hubiese rendido la pleitesía debida a la tobosina, debería de volver para informar a don Quijote si la señora de sus sueños, ha dejado de ser hortelana (discípula quizás de Pancho);y si su rostro brilla de nuevo sin necesidad de los maquillajes que usa la “biutiful pipol” (el inglés tampoco es mi fuerte).

Como ya se dijo en el cap. anterior, el de los Espejos, o sea el bachiller Sansón Carrasco fue a por lana y volvió trasquilado. O con la bella frase que lo dice ahora don Cervantes: “por no haber hallado nidos donde pensó hallar pájaros”.

El malicioso contubernio, alianza o liga vituperable, que habían concertado el Bachiller y el cura, acabó en un contundente fracaso. La musculosa fuerza del joven Sansón no pudo vencer a la fuerza del azar y del destino que don Quijote, en sus genes, tenía escrito.
Para más desgracia del Bachiller, su escudero el compadre Tomé Cecial, le dice que dimite, porque los locos deben tener protección divina, y que está más loco el que pretende luchar con un loco que el propio loco.

Por lo tanto, el especular caballero, se marcha que no aguanta ni a su Padre. Renegando de don Quijote, y con la firme promesa de vengarse de nuestro noble caballero. Esperemos que en el próximo encuentro que tengan la suerte siga del lado del de los nobles ideales.

Mientras tanto don Quijote y Sancho continúan su camino hacia Zaragoza.

Revulsiva Nota:
Este comentario pertenece a la Red de Comentarios Quijotescos, coordinados por el profesor Pedro Ojeda desde su blog La Acequia.

Revulsivos saludos.

domingo, 13 de septiembre de 2009

PLATÒN Y UN ORNITORRINCO ENTRARON EN UN BAR (2)

La elaboración y el efecto que logran los chistes, y la elaboración y el efecto que logra la filosofía están hechos de la misma materia. Juegan con la mente de formas parecidas. Esto se debe a que la filosofía y los chistes surgen del mismo impulso: confundirnos respecto a cómo son las cosas, poner nuestros mundos del revés, y dar con verdades ocultas, a menudo incómodas, sobre la vida.
Lo que el filósofo llama perspicacia, el cómico lo llama mordacidad.

He aquí un ejemplo de "Filochiste" con toques del "argumento de la analogía", que afirma que si dos consecuencias son similares, deben haber tenido causas similares.......

FILOCHISTE:

"Un anciano de noventa años va al médico y dice:
-Mi esposa, que tiene dieciocho años, está embarazada.
-Le voy a contar una historia -responde el médico-. Un hombre fue a cazar pero, en lugar de una escopeta se llevó un paraguas por error. Cuando, de pronto, le atacó un oso, el hombre blandió el paraguas , disparó y el oso cayó muerto.
-Eso es imposible -dice el anciano-. Al oso le debió de disparar otra persona.
-¡Pues eso digo yo!!!.



Revulsivos saludos amigos.

viernes, 11 de septiembre de 2009

CAPITULO (2) 14, DE DON QUIJOTE



Nuestro "membrillo" hidalgo don Quijote, reclama aún hoy en día, a su inseparable "queso" Rocinante.






Y nuestro buen queso "Rocinante" nos indica que tiene un queso adaptado para economías más "endebles", el "Rucio" de Rocinante.

Gentileza de nuestro amigo Tomás, quien nos "echa" los bocatas de diáfano salchichón.

CAP. (2) 14

(De cómo el bachiller Sansón Carrasco fue a por lana y volvió trasquilado)

Le va contando el Caballero del Bosque, Selva o espejos, a nuestro don Quijote, cómo su Sra. De Vandalia por nombre Casilda, que deriva en Casildea, es una chica voluble, caprichosa y “voltaria”, cual Giralda: giganta de Sevilla a la que hubo de vencer junto a las moles de los Toros de Guisando. Trabajos, todos éstos, fruto del capricho –como ha quedado dicho- de la suya tornadiza (gracias Óscar por el adjetivo) señora, paisana de un revulsivo servidor, de deAl.Andalus ( y de ustedes), tierra que fue ocupada un tiempo, al igual que una porción de la morería, por los (no tienen por qué ser) incivilizados vándalos.

Vencidos y humillados la “voltaria” y los “megalitotauros”, le continúa narrando el de la “Jungla”, Selva o Bosque, a don Quijote, que tuvo que descender hasta los mismísimos intestinos del infierno, por un orificio (se ignora si es el superior o el inferior) que hace de puerta, o tal vez, de salida de emergencia del averno mundo: La Sima de Cabra.

Les contaré, que la teoría más aceptada geológicamente hablando, es la de que la citada sima sirve (o mejor dicho, servía) de aliviadero o desagüe a las aguas estancadas en el podge de la Sierra de Cabra, más conocido por La Nava de cabra: inmensa, húmeda y ovejuna extensión, que este revulsivo ha recorrido infinidad de veces a causa de sus “hercúleos trabajos” pecuarios, consistentes en la “caza y captura” del escurridizo pastor serrano.
Quizás nuestro hidalgo tuvo algún pariente en Cabra. Además estuvo recaudando impuestos por la zona y residiendo en Castro del Río, ciudad a unos 20 Km de Cabra (otros 25 hay de Cabra a Priego, residencia de este revulsivo) .

Parece ser que la citada sima se ha usado durante tiempo como vertedero, llegando incluso a arrojarse una acuñación completa de dinero que se manufacturó defectuosamente.
Concluye el del Bosque la charla , que le está pegando a don Quijote, asegurándole que él es el más valiente y enamorado caballero del orbe. Y que de lo que más se precia y ufana es de haber vencido al famoso caballero don Quijote de la Mancha, quien tiene por dama de sus pensamientos a una tal Dulcinea del Toboso, más conocida por Aldonza Lorenzo, la número uno en cribar trigo. Porque en vencido este manchego caballero, vencidos están todos los que del mundo son andantes caballeros. Esto conlleva, que su mundial fama y fuerza son transferidas al sin igual Caballero de las Frondosidades o de los Espejos. Pues: “y tanto el vencedor es más honrado, cuanto más el vencido reputado”.

No acepta don Quijote el bulo que le cuenta el del Bosque, a no ser que, el derrotado que cita, estuviese encantado y con su peculiar cara: “y diciendo esto, se levantó en pie y se empuñó la espada”. El caballero de la Verdura, acepta el reto: “el que una vez, señor don Quijote pudo venceros transformado, bien podrá tener esperanza de rendiros en vuestro propio ser”.
Aplazan el duelo hasta que amanezca, pues de noche sólo merodean malhechores; van en busca de sus escuderos, quienes roncan a pierna suelta. Les mandan iniciar el protocolo del enfrentamiento. El escudero del de las “yerbas” dice a Sancho que ellos también han de luchar. Sancho le responde que de ninguna manera él puede pegar a nadie en frío, sin motivos; el de los vegetales añade que no se preocupara por esa menudencia, que él mismo le arrearía un par de guantazos y le haría entrar en calor. Pobre Sancho, ya se ve con los ojos morados.

Finalmente se libra Sancho, milagrosamente, de la contienda con su colega. Y son los dos caballeros los que montan sobre sus respectivos rocines, jumentos éstos que nunca habían dado más de cuatro pasos al galope, y no es por lo que les pesaba el cuerpo, que era bastante liviano, casi diáfano (como las rodajas de salchichón que me pone mi tendero en el bocadillo), sino más bien pareciese que les pesara el alma, ya que por comer poco estaban mayormente metafísicos ( leyendo también a Platón con el ornitorrinco).

De aquel lance, por veleidades del destino, sale don Quijote victorioso. Sancho no baja del alcornoque hasta que no ve al de la Floresta en el suelo, y con inusual ensañamiento le dice a su señor que le meta la espada por la boca. Situación ésta atípica en nuestro escudero, de quien dijera Unamuno: “¡Ah Sancho, Sancho, y cuán bien se aviene tu impiadosa crueldad de ahora con tu cobardía de antes!”.

Como lema de este capítulo podríamos elegir la significativa frase de Unamuno:
“Pues no hay sino hacerse el loco para reducir a cordura a los que lo son de veras” .

Revulsiva nota:
Este revulsivo comentario pertenece a la Red de Comentarios Quijotescos, que desde su blog La Acequia dirige (el ausente del síndrome postvacacional) nuestro querido profesor Pedro Ojeda Escudero.

domingo, 6 de septiembre de 2009

PLATÒN Y UN ORNITORRINCO ENTRARON EN UN BAR (1)


A finales del anterior curso escolar, el profesor en la Facultad de Ciencias de la Educaciòn de la Universidad de Màlaga, Miguel Àngel Santos Guerra, pronunciò una conferencia en el colegio donde mi chico recibe clases. Tuve la gran suerte de ser escuchante de aquella magnìfica y muy amena disertaciòn. Escribì varias hojas de notas, apuntes que hace tiempo he querido pasar a limpio y publicar en este revulsivo lugar. Pero el escurridizo tiempo no me deja.

Lo que sì hice, fue comprar uno de los libros que el profesor recomendò en su conferencia: "Platòn y un ornitorrinco entran en un bar". Aùn no he completado su lectura, pero me gustarìa ir compartiendo con vosotros algunos conceptos...Y CHISTES!!!. Porque este libro pretende iniciar a los profanos, como un servidor, en el difícil mundo de la filosofía.

Los autores, licenciados en filosofía por la Universidad de Harvard, están convencidos de que la filosofía y los chistes tienen mucho en común.

Dedicatoria de los autores:
" A la memoria de nuestro abuelo filosófico, GROUCHO MARX,
que resumió la esencia de nuestra ideología cuando dijo:
<<Éstos son mis principios; si no les gustan, tengo otros.>>

FILOCHISTES
Una introducción

DIMITRI: Si Atlas sostiene el mundo, ¿qué sostiene a Atlas?
TASSO: Atlas se sostiene sobre el caparazón de una tortuga.
DIMITRI: Pero, ¿sobre qué se sostiene la tortuga?
TASSO: sobre otra tortuga
DIMITRI: ¿Y qué sostiene a esa tortuga?
TASSO: Querido Dimitri, de ahí para abajo todo son tortugas.
Este fragmento de diàlogo griego antiguo ilustra a la perfecciòn el concepto filosòfico de retroceso infinito, una nociòn que aparece cuando nos preguntamos si existe una causa primera de la vida, del universo del tiempo y del espacio y, con una significaciòn aùn mayor, de un creador. Algo tiene que haber creado al creador, de modo que el caparazòn de tortuga causal no se detenga en èl.
Revulsiva Nota:
Como agradecimiento al profesor Miguel Angel Santos Guerra, le dedico la serie de publicaciones que sobre este libro pienso realizar.
Por supuesto, un saludo tambièn a todos los amigos que venìs por este revulsivo lugar.

viernes, 4 de septiembre de 2009

COMENTARIO AL CAP. (2) 13

Digo en el blog de Pedro Ojeda: La Acequia

Hoy en dìa tampoco nos debemos sorprender cuando escuchamos, mayormente a jovenzuelos, decirse tras algùn èxito obtenido:(con perdón)pedazo de cabrón, o de hijop..; pero por muy "modernos" que queramos ser, al oído le propina un garrotazo. No nos acomodamos a convivir con groserías, será que uno ya va para viejo.
Pero la costumbre, por lo que se ve, viene desde los tiempos de Cervantes.

He iniciado esta mañana mi comentario de esta manera:

CAP. (2) 13
“Divididos estaban en dos grupos, caballeros y escuderos” (los primeros bebiendo Cardhú en el Bar de oficiales, y los segundos tragando vino peleón en la cantina de los chusqueros), los más “probes” se contaban sus tristes vidas, que sólo a ellos podría interesar; los “pijos” hablaban de amores, plática que siempre se iniciaba con la resobada pregunta: “¿por ventura sois sois vos caballero enamorado?.
Se lamentaban los escuderos de su arrastrada vida, y el del Bosque añadió que “en verdad que comemos el pan en el sudor de nuestros rostros”. ¡¡Pues a menuda guarrada condenó dios a los hombres en el génesis de su existencia!!. Tomo el calificativo “guarrada” del volumen de memorias “Mira por dónde” de Fernando Savater, quien comienza el libro haciendo alusión a la citada condena bíblica: destaca la suerte que ha tenido de ganarse la vida sin tener que amasar el pan con el sudor de su frente (que menuda “guarrada” es ésto), ganándoselo limpiamente (cual maestros: Ojeda, Tucci, Abejita… jajaja) impartiendo clases y escribiendo libros.

El escudero del Bosque (no sé por qué en una sola ocasión se le llama de los Espejos) dice que con un canonicato quedará satisfecho por los servicios prestados a su amo. Sancho no se conforma con menudencias y aspira al gobierno de una ínsula. Y si no, al menos, a ver si encuentra otra bolsa de monedas extraviada, como la hallada en la Sierra Negra, cerca de la Peña Pobre.

Posteriormente, ambos escuderos hablan de sus retoños. El del bosque dice haber agarrado tres óvulos (marchosos) de su respectiva señora, “que tengo tres como tres orientales perlas”. Sancho por su parte, elogia a los dos suyos, Sanchico y Mari Sancha. Que a ella la está criando para condesa, pero que no recuerda bien si tiene 13 años o 17, alrededor de 15 debe de andar la cosa.
Algún mozo del lugar seguro que lo sabe bien; y ha de saber, incluso, el día exacto que la visitó el nuncio (véase en Luces de Bohemia cuando Max Estrella está con la “pilingui”).

De estos y otros asuntos platicaban Sancho y el escudero del Bosque, cuando al de la Triste Figura se le quedaba la boca seca y “Escupía a menudo, al parecer un cierto género de saliva pegajosa y algo seca..”. En apercibiéndose su colega ecuderil de la lengua de anfibio que se le quedó a Sancho, le ofreció de un báquico elemento, que de él, una bota repleta tenía: “¡Oh hideputa bellaco, y cómo es católico!, sentenció Sancho sobre la calidad del vino. De Ciudad Real , sin duda, sería aquel caldo, acompañáronlo además del lomo de un gigante albiconejo.
Gran banquetazo se pegaron los dos, tras el cual, quedaron dormidos con la boca llena de carne de leporino a medio mascar.

Este revulsivo comentario pertenece a la Red de Comentarios Quijotescos que desde el blog La Acequia dirige nuestro, descansado a medias, profesor Pedro Ojeda Escudero; A Q D G M A

Revulsiva Nota:

Como hoy es festivo en Priego, y ayer dejè hecha la plancha, he ido escribiendo y publicando en vivo y en directo.
A solas, y cuando aùn no ha amanecido, me gusta màs; pero en dìa festivo.. pueden pensar mal de uno...

Saludos Revulsivos y Laterales

ÑIÑA QUE HABLÓ ANTE LA O.N.U.